Desde que nacemos experimentamos continuas despedidas más o menos importantes, más o menos dolorosas, que nos permiten, a su vez, abrirnos a otros encuentros. Las personas vivimos constantemente diciendo ¡Hola! y ¡Adiós!
A pesar de que la cultura moderna evita las situaciones dolorosas, los duelos, como todo espacio humano, son una ocasión para crecer. Es más: son un espacio privilegiado para desprendernos de lo superfluo, valorar lo que es realmente importante y comenzar una vida distinta, es decir, para crecer como personas. Si tenemos miedo a sufrir en el dolor y lo evitamos, debilitamos nuestra capacidad de reacción ante las adversidades y nos desbordamos con las pérdidas, los fracasos o las frustraciones.
A esta capacidad para sobreponernos en estas situaciones la conocemos como RESILIENCIA. Ser resilientes no es sólo una fortaleza, sino, sobre todo, un aprendizaje que nos ayuda a renovarnos y cambiar.
¿Podemos crecer en el dolor? Sí, por supuesto. Por eso te invitamos a vivirlo en el taller CRECER EN EL DOLOR: LA ELABORACIÓN DEL DUELO que empieza el próximo lunes, día 17 de abril en nuestra sede de Cádiz. Serán cinco sesiones de 2 h, en horario de 5 y de 7 de la tarde, cada semana hasta el 22 de mayo. Las plazas son limitadas, por eso contacta cuanto antes para inscribirte.